Reconversion Tecnologica





CONDICIONES ECONÓMICAS PARA LA RECONVERSION TECNOLÓGICA

Introducción

El Plan de Reconversión a Tecnología Limpia (PRTL) es uno de los requisitos principales para la suscripción de un Convenio de Reconversión a Tecnología Limpia en el cual se demuestra que se requiere un plazo superior al establecido en la Resolución 909 de 2008 para dar cumplimiento a los estándares establecidos en dicha resolución.
La autoridad ambiental competente debe examinar el Plan de Reconversión a Tecnología Limpia, establecer las reglas a las que se sujetará el desarrollo del plan y consignar en un Convenio de Reconversión a Tecnología Limpia –CRTL-, cuando lo considere viable, los plazos definitivos para las transformaciones y ajustes de los procesos y de las tecnologías, las características técnicas básicas de la reconversión tecnológica a desarrollarse, además de la aplicación de las normas y estándares correspondientes y las consecuencias del incumplimiento del convenio. Adicionalmente, una autoridad ambiental no aprobará un Plan de Reconversión a Tecnología Limpia cuando sea presentado extemporáneamente, si la tecnología que se propone implementar no cumple los objetivos planteados para ser considerada como tecnología más limpia, si a la fecha de su presentación se adeudan multas por la comisión de infracciones a las normas y estándares ambientales, si las informaciones aportadas en el "Informe de Estado de Emisiones" (IE-1) o en la solicitud del Plan de Reconversión propuesto son falsas o si pese a la presentación del Plan de Reconversión a Tecnología
Limpia, la autoridad ambiental considera, con fundadas razones técnicas, que dicha obra, industria o actividad continuará causando contaminación extrema y deterioro grave al medio ambiente o la salud humana, sin posibilidad de cumplimiento de las normas de calidad y de emisión vigentes.
De acuerdo con lo establecido en la legislación vigente (Decreto 948 de 1995), se considerarán únicamente como tecnologías limpias, los instrumentos, métodos y procedimientos de producción, resultantes del más avanzado desarrollo de la ciencia y la tecnología existentes, que en su conjunto se hallen disponibles en el mercado nacional o internacional, o sean desarrollados específicamente para el cumplimiento de los objetivos de reconversión a tecnologías limpias y que siendo utilizados en las actividades industriales, comerciales o de servicio, han sido diseñados de manera tal que como
resultado de la respectiva actividad se produzca, en todo su proceso, el mínimo impacto sobre el medio ambiente, los recursos naturales renovables y la salud humana.
Dichas tecnologías aunque pueden emplear procesos de combustión o combustibles más limpios, deben, además de dar cumplimiento a las normas y estándares de emisiones al aire, lograr efectivamente el cumplimiento de por menos dos los siguientes objetivos:

a. Reducir y minimizar la generación de contaminantes, tanto en cantidad, por unidad de producción, como en toxicidad y peligrosidad, antes de ser tratados por los equipos de control.
b. Reducir y minimizar la utilización de recursos naturales y de energía por unidad de producción.
c. Reutilizar o reciclar subproductos o materias primas, por unidad de producción o incorporar a los procesos de producción materiales reciclados.
De igual manera, la regulación actual establece que el PRTL debe contener como mínimo los aspectos técnicos, económicos y financieros que permitan fijar los requisitos para su cumplimiento y en este sentido debe incluir por lo menos:
_ Definición precisa de los cambios parciales o totales en los procesos de producción, sin excluir necesariamente el uso de controles al final del proceso
_ Estimativo de la reducción o minimización de los contaminantes a la atmósfera, tanto en su cantidad, por unidad de producción, como en su toxicidad y peligrosidad, antes de ser tratados por los equipos de control
_ Estimativo de la reducción o minimización en la utilización de recursos naturales y energía, por unidad de producción
_ Descripción técnica de los procesos de reutilización o reciclaje, así como de las
cantidades de los subproductos o materias primas reciclados o reutilizados, por unidad de producción.
_ Presupuesto del costo total de la reconversión
_ Descripción de los procesos de combustión o del uso de combustibles más limpios, si se emplean
Por otro lado, el sistema de control y prevención integrados de la contaminación (IPPC) utilizado por la Unión Europea se instrumenta en torno a la utilización de las mejores técnicas disponibles (MTDs), conocidas también como BATs (Best Available Techniques) definidas en la directiva 96/61/CE como:

Las mejores técnicas disponibles incluyen en su evaluación el costo económico de su
incorporación, por lo que la disponibilidad no sólo es técnica, sino también económica.
Los criterios para determinar las mejores técnicas disponibles se recogen en el Anexo IV de la directiva 96/61/CE (menos residuos, sustancias menos peligrosas, aprovechamiento de residuos, consumo y naturaleza de materias primas, entre otras).

En este sentido, una Mejor Técnica Disponible busca conseguir el balance más sostenible
posible entre el proceso industrial, el desarrollo económico, el consumo de recursos y la
capacidad de regeneración de la naturaleza, entendiéndola como un todo.1
La novedad que aporta esta directiva respecto a la relación Administración – Industria
radica en el hecho de que, por primera vez, se tiene en cuenta la necesidad de realizar un
análisis costo – beneficio en el momento de la elección de la MTD que sea más adecuada
para cada actividad industrial. Este tratamiento, que pretende ser individualizado para
cada caso, está basado en tres requisitos básicos que ayudan a determinar la viabilidad
de la implantación de una determinada MTD a una actividad industrial. Estas condiciones
son las siguientes:

• Condiciones económicas
• Condiciones técnicas de la instalación
• Condiciones locales del ambiente

Una vez analizados estos tres requisitos, se busca la elección de la MTD más
conveniente en función del tipo de actividad industrial que no implique un costo excesivo
para el industrial.
Finalmente, según el grado de reconversión tecnológica que se requiera para reducir los
impactos sobre el medio ambiente, los recursos naturales renovables y la salud humana,
las fuentes fijas causantes de emisiones contaminantes a la atmósfera se podrán
clasificar en cuatro categorías que permiten extender el plazo para el cumplimiento de la
Resolución 909 de 2008 hasta en 10 años para la aplicación de los estándares.
Por todo lo mencionado anteriormente, a continuación se propone un procedimiento que
permite evaluar de manera objetiva el Plan de Reconversión a Tecnología Limpia
presentado a la autoridad ambiental.


Clasificación de las opciones de acuerdo con su beneficio ambiental

Se debe comparar la información de los efectos ambientales evaluados anteriormente con
el fin de priorizar las opciones de acuerdo con el detrimento ambiental. Si alguna opción
muestra que genera el menor impacto en todas las consideraciones ambientales
evaluadas, esta opción puede ser considerada como la mejor opción sin 
necesidad de realizar evaluaciones adicionales.
Si la opción que genera el menor impacto ambiental es la que se va a implementar, esta opción se asume como la de tecnología limpia y se justifica con base en los impactos ambientales evaluados anteriormente.
Si no es posible clasificar las opciones debido a que existen conflictos entre el desempeño ambiental relativo de las diferentes opciones o se quiere incluir el costo para decidir la menor tecnología limpia, se debe continuar con la evaluación de las alternativas.

Evaluación de costos

 Este punto se debe completar solamente cuando se realice una evaluación de diferentes
opciones. No es necesaria para la evaluación del impacto ambiental de la instalación.
El propósito de esta evaluación es estimar los costos de implementación de cada una de
las opciones evaluadas anteriormente, con el fin de realizar un balance de los costos de
controlar las emisiones contaminantes con los beneficios ambientales que se pueden
lograr.
Si la tecnología limpia que se propone implementar es la opción que demuestra
claramente ser la que genere el menor impacto ambiental, no es necesaria la evaluación
de los costos para implementar la opción.
Los lineamientos siguientes presentan un procedimiento consistente que se debe seguir
para presentar la información económica y financiera de los costos y la costo-efectividad
de la tecnología. Esta información debe ser suministrada en detalle para que la autoridad
ambiental pueda evaluar adecuadamente la justificación de la tecnología limpia a
implementar.
Para cada opción a ser considerada en la evaluación, se debe suministrar una estimación
de los costos de capital de los equipos y la instalación y un promedio del cambio anual en
los costos de mantenimiento y operación.
Los costos de capital incluyen todos los gastos necesarios para la adquisición de equipos
que requieran las tecnologías de control de la contaminación, los costos de mano de obra
y materiales para la instalación de los equipos, los costos de preparación del sitio
(incluyendo el desmantelamiento) y los edificios y otros costos indirectos de instalación.
Los costos de capital deben incluir no sólo los relacionados con los propios de los equipos
de control de la contaminación, sino también los costos de hacer cambios en el proceso
integrado o la instalación de sistemas de control y supervisión.
El cambio anual recurrente en los costos de operación para las opciones consiste en los
costos adicionales menos los costos ahorrados como resultado de la aplicación de la
opción. Esto debe incluir cualquier cambio en la capacidad de producción. Los costos
anuales recurrentes para los sistemas de control se clasifican en tres: costos directos
(variables y semi-variables), costos indirectos (fijos) y recursos recuperados.
Los costos directos son aquellos que tienden a ser proporcionales o parcialmente
proporcionales a la cantidad de emisiones procesadas por el sistema de control por
unidad de tiempo o, en el caso de procesos más limpios, la cantidad de material
procesado o fabricado por unidad de tiempo. Estos costos incluyen costos de las materias
primas, servicios públicos (vapor, electricidad, procesamiento y enfriamiento de agua,
entre otros), tratamiento y disposición de residuos, materiales para mantenimiento, piezas
de repuesto, y labores de operación, supervisión y mantenimiento.

Los costos anuales indirectos o "fijos" son aquellos cuyos valores son totalmente
independientes de la emisión contaminante y que de hecho se incurre en ellos incluso si
el sistema de control de la contaminación estuviera apagado. Entre estos costos se
incluyen categorías tales como gastos generales, gastos administrativos y seguros.
Los costos anuales directos e indirectos pueden ser compensados por la recuperación de recursos, que resultan de los materiales o la energía recuperada por el sistema de control, que pueden ser vendidos, reciclados al proceso o reutilizados en otros lugares de la nstalación. De estos recursos, a su vez, deben ser descontados los costos necesarios para su procesamiento, almacenamiento, transporte y cualquier otro paso necesario para hacer los materiales o la energía recuperada, reutilizables o re-vendibles. Estos recursos también incluyen la reducción de necesidades de mano de obra, mayor eficiencia de producción o mejoras en la calidad del producto.


Selección de la mejor tecnología limpia

 El propósito de este punto es identificar la mejor tecnología disponible entre las opciones
evaluadas, balanceando los beneficios ambientales de cada opción contra los costos de
su implementación.

La selección de la opción que represente la mejor tecnología limpia involucra la
consideración de la información económica y ambiental generada en las secciones
anteriores.
Para identificar la opción que represente la mejor tecnología disponible para la actividad o instalación, se debe realizar una evaluación comparativa de las ventajas ambientales y los costos entre las opciones.
Una vez seleccionada la opción, se debe suministrar a la autoridad ambiental un 
resumen que soporte la decisión incluyendo
las decisiones tomadas en las etapas previas de la evaluación, los métodos usados para comparar los costos y los beneficios, las suposiciones realizadas sobre la importancia relativa de las consideraciones ambientales
y la sensibilidad de la decisión a cualquier incertidumbre en la información o en las
suposiciones.
Una vez que las opciones han sido clasificadas de acuerdo con el desempeño ambiental,
usualmente la opción que genera los menores impactos sobre el ambiente es la
tecnología limpia, a menos que las consideraciones económicas demuestren que no se
encuentra disponible. La principal consideración para determinar si una opción es la
tecnología limpia es que los costos de su implementación no debe ser desproporcionada
con relación al beneficio ambiental que se obtenga. Por lo tanto, no es razonable
implementar una opción significativamente costosa que alcance solamente una mejora
marginal del ambiente en comparación con otra opción menos costosa.
Una decisión objetiva se debe realizar para equilibrar los costos y las ventajas cuando se
seleccione la tecnología limpia. Existen muchas maneras de llevar a cabo esta decisión,
dependiendo de la complejidad de la situación. Por ejemplo, en algunas situaciones, los
beneficios ambientales de las diferentes opciones pueden basarse en el control de un
contaminante único o dominante. Esto proporciona un factor de costo/beneficio común
que puede ser utilizado para la comparación de opciones, tales como "costo de la
reducción de emisión de una tonelada del contaminante". Sin embargo, existen otras
situaciones en que los beneficios son más complejos, por ejemplo, cuando se involucran
diferentes contaminantes o medios que se contaminan. En estos casos, se puede
necesitar la opinión de expertos para identificar los riesgos ambientales más importantes y
el valor de su control. Ejemplos de enfoques de costo/beneficio se presentan a
continuación.

Contaminante dominante o impacto ambiental

En algunos casos, el beneficio ambiental de la opción se puede representar fácilmente por un solo contaminante (por ejemplo, el control de NOx, CO2, Hg) o un grupo de contaminantes con efectos similares a un medio y un receptor (por ejemplo, salud humana o toxicidad acuática). Cuando hay varias opciones puede ser posible trazar una curva de costos contra beneficios ambientales. Con tres o más puntos puede ser posible identificar el punto, después del cual, el costo de la reducción aumenta considerablemente. Este tipo de análisis indica el punto en el cual se hace demasiado costoso realizar mejoras.
En otros casos, los beneficios ambientales de opciones diferentes pueden involucrar contaminantes diferentes, medios o efectos ambientales o una combinación de contaminantes y efectos en los cuales no sobresale un solo efecto. En estos casos no es posible usualmente agregar las “ventajas ambientales” sobre una base común y la evaluación en más compleja.
En estos casos es necesario comparar los beneficios combinados de cada opción,
considerando la importancia relativa de cada consideración ambiental como se mencionó en las secciones anteriores. Las prioridades identificadas en esta evaluación deben usarse como los principales indicadores ambientales en la evaluación de la relación costo beneficio. Puede ser necesario, en la mayoría de los casos, reducir los principales aspectos a una o dos sustancias contaminantes para hacer la decisión más factible.
Las siguientes consideraciones y herramientas de evaluación pueden ser usadas en circunstancias apropiadas:
_ Comparación de la concentración ambiental esperada con los estándares
ambientales: Esto muestra la opción que es más sensible en el contexto de cercanía a los estándares ambientales, lo que indica la necesidad de dar una prioridad mayor a los efectos de una opción particular.
_ Consideración de receptores sensibles: Adicional al cumplimiento de los estándares ambientales relevantes, se deben considerar las consecuencias de la emisión de contaminantes en receptores particularmente sensibles en el ambiente receptor.

Evaluación de el costo-efectividad

Esto no se refiere a una evaluación objetiva del valor de realizar los gastos para reducir una determinada cantidad de contaminante.
Se puede hacer una comparación del incremento de los costos analizados de cada opción con el cambio incremental de un efecto ambiental. Para los procesos existentes, esto se debe basar en los costos marginales y beneficios sobre el caso base o existente. La comparación de más de una consideración ambiental por el método del costo incremental se puede usar donde más de una consideración ambiental es importante. Si resulta que las tecnologías limpias disponibles varían de acuerdo con el efecto ambiental utilizado, se debe justificar la selección final con referencia al efecto más importante o combinar las tecnologías relevantes de cada tecnología potencial para producir una opción que pueda ser la mejor tecnología limpia con respecto a los efectos ambientales.

Disponibilidad de capital

Si una opción se considera como la mejor tecnología limpia, se debe implementar dentro de una escala de tiempo razonable. Esto puede depender de la disponibilidad de capital de inversión de la instalación y de la cantidad requerida. Donde existe más de un proyecto de protección ambiental que requiera inversión y el capital es limitado, se debe acordar una priorización de la implementación de las tecnologías con la autoridad ambiental competente. Se debe dar prioridad a aquellos proyectos que generen los mayores beneficios ambientales.

¿QUE TAN EFICIENTES SON LOS MODELOS DE PRODUCCIÓN DE ENERGÍA?
Resultado de imagen para la eficiencia de los modelos de produccion de energia

Al igual que ocurre con otros recursos productivos (trabajo, capital, recursos hídricos, etc.) la eficiencia en el ámbito de la energía se refiere a la relación entre los resultados obtenidos y los recursos, en este caso energéticos, utilizados para su consecución. En términos macro económicos, la eficiencia energética se analiza a través del concepto de intensidad energética, que se calcula como el cociente entre el consumo energético de una economía y su producto interior bruto (PIB). Es decir, muestra la cantidad de energía necesaria para producir una unidad de PIB en la economía.
A pesar de la importancia de mejorar la eficiencia energética para los objetivos de sostenibilidad económica y ambiental (ver Insostenibilidad del sistema energético y vías de solución), la evolución histórica de esta variable no ha sido plenamente satisfactoria en España hasta el año 2005. Sin embargo, como se puede ver en la Figura 1‑1, entre 2005 y 2015 se observa un gran avance en la mejora de la intensidad energética final, descendiendo aproximadamente un 20%.
La eficiencia energética puede contribuir de forma decisiva a la lucha contra el cambio climático, a la mejora de la seguridad energética y de la competitividad. Incluso se plantea por parte de los gobiernos recientemente como un importante dinamizador del desarrollo económico y el empleo (ver Insostenibilidad del sistema energético y vías de solución).
En relación al cambio climático, El Acuerdo de París (en vigor desde el 4 de noviembre de 2016) establece una serie de medidas para combatirlo y que tienen como principal objeto reducir los gases GEI gracias a la introducción al mix energético de tecnologías cada vez más limpias. Según la Agencia Internacional de la Energía (EIA), para alcanzar el escenario de no superar un calentamiento global de 2ºC, se necesita establecer una ruta que vaya en línea con las políticas internacionales, planteándose una reducción de las emisiones globales de GEI en 2050 cercana al 90% frente al año 2000 (ver El cambio climático y los acuerdos internacionales). La eficiencia energética se presenta como el principal instrumento, responsable de casi un 60% de la reducción de emisiones. Por ello, la eficiencia energética se presenta como un elemento crucial para luchar contra el cambio climático.
Al fomentar la eficiencia energética, el modelo mejora, reduciendo el consumo energético y evitando las emisiones de CO2 innecesarias, ayudando a cumplir el objetivo que se espera de España en la UE, en relación a estas reducciones de gases de efecto invernadero.


Comentarios

Entradas populares de este blog

energias limpias

ALTERNATIVAS PARA EL USO DE LOS PANELES SOLARES